Mi belleza es: Javi

𝐐𝐮𝐞́ 𝐞𝐬 𝐥𝐚 𝐛𝐞𝐥𝐥𝐞𝐳𝐚 ⁣

La belleza es simplemente ser. Ser yo misma con mis virtudes, debilidades, mis talentos, mis fracasos, mis días buenos y mis días malos. La belleza somos todos, en todas nuestras versiones, a nuestra manera y en constante cambio. Y es única ya que no tiene formas, números ni colores y por lo tanto no juzga. Solo acepta, respeta y ama. ⁣

La belleza es querer. Quererse a sí mismo y a un otro, es mirarse con amor, con cariño y autocompasión. Es intentar escuchar, aceptar y comprender a mi cuerpo día a día, valorando todo lo que me permite hacer y también lo que no, entendiendo que somos seres que se equivocan, pero que logramos aprender de nuestro errores. ⁣

La belleza es confiar. Confiar en mí y en las capacidades que tengo de lograr lo que me proponga. La belleza es encontrarle el sentido a las cosas, aprender de los errores, es mirarse con aprecio, un aprecio incondicional que me permite levantarme cada vez que lo necesite. ⁣

La belleza esta siempre, aunque a veces no la veamos. Está en las risas, en las penas, en mis amigos y en mi familia. Está en mis sentimientos, en mis miedos y mi valentía. Pero sobre todo está en mi mente: una mente sabía que a pesar de a veces no saber lo que quiere, sabe poner límites porque me conoce y quiere lo mejor para mí. ⁣

La belleza es un camino que voy construyendo día a día. Es un camino que carga toda mi historia, que me está llevando poco a poco a la libertad plena, a la felicidad y a una sensación de satisfacción y orgullo propio que desde que partí, ha ido sanando todas las heridas que tengo. Es un camino con constantes obstáculos pero ellos mismos te vas entregando todas las herramientas para enfrentarlos. ⁣

Lo más bonito de este camino es que te vas dando cuenta que no estás sola. Que somos muchos quienes lo estamos recorriendo y que contamos unos con otros. Que todos tenemos nuestro ritmo y formas de caminarlo, pero que el apoyo se mantiene incondicional hasta el final. ⁣

Por último, encontrar la belleza te enseña a perdonar. Perdonarme a mí misma y a los otros. Te ayuda a establecer una relación contigo mismo sin rencores, sin exigencias ni reglas, solo basándose en el amor.